En el centro de Tailandia se encuentra la región con mayor producción de piñas.
Hasta hace poco tiempo Apirak Kosayothin (empresario tailandés) supervisaba las cosechas de sus campos de piñas, que iban destinada a las fábricas de conservas para la exportación a Japón y Europa.
Las hojas sobrantes se tiraban, hasta que pensó que se podían reutilizar y sacarles provecho a ese material natural no deseado. Esta idea se ha convertido en fuente de ingresos de dinero para Apirak.
Reutilizando estas hojas, ha creado el papel o fibra de hojas de piña. Este proceso, está proporcionando puestos de trabajo en la provincia al sur de Bangkok.
El resultado es un grueso papel hecho a mano. Se utiliza como regalo, se hacen cajas, álbunes de fotos y marcos de cuadros para la vender a los tailandeses y turistas. Fuente: www.cartage.org.
La estructura fibrosa de este producto es tan resistente que puede usarse para la fabricación de sillas, sillones, mesas y otros objetos de decoración. El mejor ejemplo de la utilización de la hoja de piña en diseño de mobiliarios es la empresa Yothaka
2008/07/25 at 1:08 am
Me encanto la fotografia!